Servicios procuradora
Ofrezco representación procesal profesional y personalizada en los distintos órdenes jurisdiccionales, ayudando a particulares, empresas y letrados.
Áreas de Especialización
Con más de 14 años de experiencia, aseguro un enfoque comprometido y transparente para impulsar el correcto desarrollo de cada caso.
Derecho Civil
Tramitación de demandas civiles, desahucios y reclamaciones de cantidad y contratos, garantizando una representación eficaz.
Derecho Mercantil
Gestión de conflictos societarios, concursos de acreedores y reclamaciones empresariales con soluciones personalizadas.
Derecho Penal
Representación en procedimientos penales para particulares y empresas, con un enfoque estratégico y profesional.
Derecho Contencioso-Administrativo
Defensa en recursos y procedimientos contra la Administración Pública, asegurando protección de tus derechos.
Derecho Laboral-Social
Representación en conflictos laborales como despidos y reclamaciones salariales, velando por tus intereses.
Apoyo a Profesionales del Derecho
Colaboración con letrados en la tramitación y seguimiento de casos, garantizando un enlace ágil con los tribunales.
Proceso de trabajo
Descubre cómo gestiono cada caso con un enfoque claro, eficiente y totalmente adaptado a tus necesidades legales.

Consulta inicial
Analizo tu caso y evalúo las necesidades específicas.

Estrategia procesal
Diseño un plan de acción adaptado a tus objetivos.

Seguimiento personalizado
Te mantengo informado en todo momento hasta la resolución del caso.
Conoce más acerca de la figura del procurador
Un procurador es un profesional del derecho que representa a particulares y empresas en los tribunales. Su función principal es garantizar la correcta tramitación de los procedimientos judiciales, actuar como enlace entre el cliente y el juzgado, y velar por el cumplimiento de plazos procesales.
Sí, en muchos procedimientos judiciales es obligatorio contar con un procurador, especialmente en aquellos que superen los límites establecidos por ley en cuanto a cuantías o complejidad. El procurador asegura que el procedimiento siga adelante sin errores procesales.
El abogado es quien asesora legalmente al cliente y defiende su caso en los tribunales. El procurador, por su parte, es el representante procesal encargado de tramitar los escritos, notificaciones y gestionar la relación con los juzgados para garantizar que todo se realice dentro de los plazos legales.
Un procurador agiliza el proceso judicial, se asegura de que no se pierdan plazos importantes y gestiona todas las notificaciones y comunicaciones con el tribunal. Esto reduce la carga de trabajo del cliente y del abogado, asegurando que el procedimiento sea eficiente y correcto.
La intervención de un procurador es necesaria en procedimientos civiles, mercantiles, laborales, contencioso-administrativos y penales, especialmente en aquellos que requieren representación obligatoria según la ley.
Confía en una experta para representar tus intereses legales
Con más de 14 años de experiencia en representación procesal, estoy aquí para ayudarte a resolver tus trámites legales de manera eficiente y profesional.